• Frutas y verduras: Son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes que fortalecen el sistema inmunológico. Ejemplos de frutas y verduras que debes incluir en la dieta de tu hijo son: naranjas, kiwis, fresas, arándanos, brócoli, espinacas, zanahorias, entre otros.
• Yogur y alimentos fermentados: Contienen probióticos que pueden mejorar la salud intestinal y reforzar el sistema impermeable. Ejemplos de alimentos fermentados que puedes incluir en la dieta de tu hijo son: yogur natural, kefir, chucrut, kombucha, entre otros.
• Frutos secos: Son ricos en nutrientes esenciales como vitamina E, selenio y zinc que ayudan a reforzar las defensas. Ejemplos de frutos secos que puedes incluir en la dieta de tu hijo son: nuts, almendras, pistachos, entre otros.
• Pescado y mariscos: Contienen ácidos grasos omega-3 que ayudan a reducir la inflamación y reforzar el sistema inmunológico. Ejemplos de pescados y mariscos que puedes incluir en la dieta de tu hijo son: salmón, atún, sardinas, camarones, entre otros.
• Ajo: Contiene compuestos que tienen propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias, por lo que puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico.
Es importante tener en cuenta que una dieta equilibrada y variada es esencial para reforzar el sistema inmunológico de tu hijo. Además de los alimentos también, es importante asegurarse de que su hijo esté consumiendo suficientes proteínas, carbohidratos y grasas saludables, y que esté hidratado adecuadamente.
Recuerda que si tienes dudas en el cuidado y crecimiento de tu bebé, tu Pediatra te puede ayudar en todo momento.
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